El Instructorado de Kundalini Tantra Yoga ha significado un gran proceso de aprendizaje, en el cual si he podido experimentar una serie de cambios. A nivel físico, el beneficio del cual soy más consciente es que me he dado cuenta de la capacidad que poseemos de poder controlar la respiración, y que no es simplemente un proceso biológico por si solo; el usar las técnicas de pranayama en momentos específicos, ya sea para calmarme o para energizarme, es una cosa que probablemente antes de iniciar este viaje no era capaz de ver. A nivel mental o emocional, esta formación me ha permitido vivir con mayor consciencia, sintiendo la importancia de vivir el presente, el ahora, aunque en situaciones difíciles uno tiende a desenfocarse, es ahí cuando hago uso de las herramientas aprendidas en el curso. La práctica habitual de meditación también es una herramienta que agradezco mucho en este camino, la cual me permite volver a mi centro y a la calma cuando la ansiedad se hace presente. Además, no puedo dejar de mencionar que haber comenzado a hacer parte de mi vida diaria el uso de mantras ha sido una experiencia muy agradable y placentera. El instructorado, también ha despertado en mí el interés en seguir aprendiendo y conociendo las diferentes herramientas que nos ayudan en este camino del despertar espiritual, me acercó a lo que venía buscando que es conectar conmigo misma, sanar heridas que probablemente no sabía que estaban ahí bloqueándome; para finalmente, vivir en equilibrio y en armonía con el universo, y si es posible, ayudar a que otros conozcan estas infinitas posibilidades que tenemos de sanar, porque todo lo que necesitamos para ser felices está en nuestro interior. Agradezco enormemente todo lo que este instructorado trajo a mi vida, el aprendizaje y las personas que aquí conocí.